Alguna vez hemos presentado o presenciado alguno de los trastornos del sueño más comunes. Nos podemos asustar al no conocerlos, así que los explicaré de la forma más sencilla para que sepas identificarlos.
¿Qué son los trastornos del sueño?
Son dificultades, problemas o afecciones que puede presentar una persona a lo largo de su vida, ya sea cada poco tiempo o una vez en años.
Estas dificultades son las que evitan el buen descanso y sueño, necesarios para llevar una vida activa y saludable.
Si son persistentes es necesario contactar con médicos profesionales para recibir medicación o terapias que ayuden a mejorar el buen dormir.
¿Cuáles son los 5 principales trastornos del sueño?
Existen muchos trastornos asociados al sueño y a su irregularidad, entre los 5 principales se encuentran los siguientes, que serán explicados en el apartado siguiente:
- Insomnio
- Apnea del sueño
- Síndrome de las piernas inquietas
- Hipersomnias
- Parasomnias
Cada uno de ellos representa una dificultad que afecta cada aspecto de la vida de las personas que lo padecen, siendo cada vez más peligrosos.
Trastornos del sueño
Es imprescindible que conozcas las principales formas de trastornos del sueño. Pueden existir una gran cantidad pero con que conozcas las más importantes es más que suficiente.
Ya que es necesario que veas como los trastornos afectan el día a día de las personas en todo el mundo, y sepas cuándo ir al médico.
No debes preocuparte de más con ellos pero tampoco vas a tomarlo a la ligera y dejar que pase, con que recibas atención de un médico y te de un diagnóstico y opciones de tratamiento, es suficiente.
Insomnio
Es el trastorno del sueño más común entre la población y hace referencia a la dificultad o incapacidad de una persona para conciliar el sueño así como para mantenerlo.
La mayoría de estas personas presentan insomnio aunque cuenten con todas las comodidades que se necesitan a la hora de dormir.
Apnea del sueño
Es la alteración del patrón respiratorio normal. Se puede presentar y clasificar de distintas maneras, aunque las más comunes poseen las siguientes características:
- Disminución o ausencia del movimiento respiratorio.
- Aumento excesivo de los movimientos respiratorios debido a una obstrucción mínima, parcial o total.
Se pueden presentar de forma intermitente o por ciclos y varias de un día a otro.
Síndrome de las piernas inquietas (Enfermedad de Willis-Ekbom)
Es la dificultad de mantener las piernas tranquilas cuando se intenta conciliar el sueño, permaneciendo en movimiento hasta llegar al sueño profundo.
Se presenta con hormigueo en las extremidades inferiores, haciendo que mantener la quietud sea más complicado.
Hipersomnias
Se traduce en una somnolencia diurna en que el tiempo de sueño diario aumenta en gran medida. La persona suele pasar el día en modo automático lo que no impide mucho la capacidad de realizar su trabajo.
Mientras las situaciones sean más simples y rutinarias, más automática será el comportamiento, aunque pase todo el día con la sensación de sueño.
Parasomnias
Hay distintos tipos de este trastorno del sueño, el cual se caracteriza por presentar conductas anormales al momento de dormir o al despertar, las cuales pueden ser, hablar, caminar y hasta comer.
Así como puede haber confusión al momento de despertar, entre las principales parasomnias conocidas, están:
Sonambulismo
Es el comportamiento que incluye actividades asociadas a la vigilia como caminar, salir, ir al baño, comer; mientras la persona se encuentra en un sueño profundo. En el cual es muy difícil que despierte, aunque al hacerlo olvida o no recuerda lo que pasó.
Terrores nocturnos
Durante el sueño profundo la persona (pudiendo ser desde niños a adultos) suele permanecer sentada, con gestos de miedo y síntomas simpáticos como la aceleración del corazón y la respiración, así como el sudor intenso. Además está acompañado de gritos y llanto muy fuertes.
Parálisis del sueño
Representa una de las experiencias más traumáticas para la mayoría, ya que se trata de unos minutos durante el sueño profundo en que una persona se despierta y se encuentra consciente.
Pero además de eso, no tiene la capacidad de moverse, hablar o hacer otra cosa más que observar su alrededor. Y a esto le sumamos que puede presentar alucinaciones lo que aumenta el miedo que experimenta la persona.
Pesadillas
Se trata de sueños muy vividos y que parecen ser reales, caracterizados por ser de situaciones negativas y en su mayoría peligrosas. Normalmente la persona está siendo perseguida o está a punto de morir.
Aunque se sepa que son sueños, las personas igual despiertan con sensación de miedo, evitando ese día realizar cualquier tarea que comprometa su seguridad.
Narcolepsia
La persona presenta episodios de somnolencia diurna pero tiende a quedarse dormido repentinamente durante el día. Si no tiene algo importante que hacer o que no requiera su total atención, suele caer en un sueño profundo de forma rápida.
Aunque duerma unos minutos y se despierte descansado, a las pocas horas volverá a sentir somnolencia y necesidad de volver a dormir, haciéndolo si tiene la oportunidad.
Alteraciones del ritmo circadiano
Hay varios trastornos del sueño que se encuentran incluidos en esta categoría, los cuales son fáciles de entender y reconocer. Por ser nada más que cambio en el ritmo de sueño diario, que puede estar adelantado o atrasado.
Ritmo irregular
El ritmo circadiano de vigilia y sueño se encuentra desordenado, inverso, adelantado o atrasado, afectando los horarios de sueño en una persona.
Un ejemplo es, una persona que duerma por el día y se mantenga activo por la noche, lo que suele ocurrir en los adolescentes.
Jet Lag
Se presenta como un desequilibrio o irregularidad en el huso horario, donde una persona que suele viajar a destinos muy lejanos, debe adecuarse a los horarios de esos lugares.
Y al regresar a su hogar no logra conciliar el sueño a las horas establecidas, apareciendo el cansancio general, irritabilidad y estrés.
¿Qué causa los Trastornos del Sueño?
Entre las principales causas de estos trastornos se encuentran las siguientes que ordenare más adelante. Las cuales pueden poner en riesgo, ya sea en mayor o menor medida, la calidad del sueño:
- Enfermedades.
- Medicamentos.
- Alimentos (exceso de azúcar o estimulantes).
- Bebidas (exceso de azúcar y/o cafeína, estimulantes).
- Horarios.
- Adolescencia.
- Envejecimiento.
- Responsabilidades.
- Afecciones mentales.
Principales síntomas de los trastornos del sueño
Entre los principales síntomas, los más conocidos y evidentes son los siguientes:
Ronquido
Acompañado a veces de jadeos, palabras, resoplo y pérdida de la respiración por cortos períodos de tiempo.
Parestesias
Hormigueo, pinchazos o sensación de que algo repta por la pierna.
Somnolencia
Normalmente diurna que afecta la realización normal de las actividades diarias de una manera activa y proactiva.
Movimientos inconscientes
Suelen llegar como sacudidas, donde los músculos se tensan de forma regular o irregular.
Despertar repentino
Ocurren durante la noche, haciéndose más complicado volver a quedarse dormido. La persona puede despertar una o varias veces durante toda la noche.
Sueños vívidos
Hace referencia a sueños más reales de lo acostumbrado,los cuales al ser más peligrosos son más propensos a lograr que la persona despierte. Debido a la sensación de peligro inminente que se presenta.
Debilidad muscular
Puede aparecer al momento de levantarse de la cama, así como es característico al momento de reír, molestarse o sentir miedo, cuando se tiene alguno de estos trastornos del sueño.
¿Cómo se diagnostican estos trastornos?
Normalmente para diagnosticar los trastornos del sueño es necesario ir al médico y esperar que revisen su historia clínica, características del sueño y realizar un examen físico.
Además se realiza un polisomnograma, el cual es un estudio especializado para el sueño.
En donde se obtienen los siguientes datos:
- Movimientos oculares
- Actividad cerebral
- Signos vitales (pulso, respiración, temperatura y tensión arterial)
También existen otros tipos de estudios más especializados a la hora de obtener un diagnóstico más complicado.
Tratamientos conocidos
Los tratamientos suelen incluir cambio de estilo de vida. Se incluyen hábitos de sueño, alimentación y otros.
También se utilizan las terapias de relajación y técnicas cognitivas para disminuir la ansiedad.
Para mejorar el descanso y reposo en las personas se puede incluir medicamentos como como pastillas para dormir por un corto periodo de tiempo para ayudar al descanso óptimo.
También se incluye la melatonina en el tratamiento con productos naturales ya que es la principal hormona del sueño.